Con la celebración del Día Internacional de la Paz —instituido por las Naciones Unidas desde 1981—, el 21 de septiembre han iniciado las Jornadas Internacionales Lasalianas por la Paz 2023 (ILDP por sus siglas en inglés) que se extenderán hasta el 21 de octubre.
Promover la paz desde la propia realidad
Bajo el lema “La paz a nuestro alcance”, todos los lasalianos —y de modo especial los Jóvenes Lasalianos— están invitados “a promover la paz desde su propia realidad, empezar por sí mismo, a no dejarse llevar ni difundir corrientes de odio y conflicto, sino a detenerse, pensar y ver cómo puede ayudar a promover la paz”, comenta Mourad Barsoum, Director de la Oficina de Pastoral Vocacional y Voluntariado de La Salle a nivel global.
En este sentido —continúa Mourad— “promover la paz está al alcance de todos. No se trata de un trabajo extraordinario o de grandes proyectos, sino de hacer el bien a nuestro prójimo, sonreír, agradecer, y realizar actos de bondad y de amor”.
¿Por dónde empezar? Para el directivo egipcio es importante, “en primer lugar, sensibilizar a los lasalianos frente a los diferentes conflictos que ya existen, pues no vivimos solos y las personas de nuestro tiempo sufren situaciones traumáticas. En segundo lugar, hacer un acto de amor con estas personas, un acto que demuestre que estamos unidos a ellas”. “También sería bueno desarrollar un pequeño proyecto de caridad y poder ayudarles”, concluye Mourad.
“La paz es fruto de la justicia”
Por su parte, durante el acto de lanzamiento de las ILDP —transmitido a través de las redes sociales de Jóvenes Lasalianos—, el Hno. Santiago Rodríguez Mancini, Director de la Comunidad Central de la Casa Generalicia, en Roma, ha subrayado que “la paz no solo es la ausencia de conflictos”, pues “detrás de las guerras y de los conflictos hay siempre un conflicto mayor que es la injusticia”. Por eso, “la paz es el fruto de la justicia”, apostilla el religioso argentino.
Este mes lasaliano por la paz se inspira en la celebración de la ONU. No obstante, su origen se remonta a los inicios de este milenio, cuando se celebró una reunión de Jóvenes Lasalianos en la que no pudieron participar dos de ellos porque en su país había iniciado una guerra. Ante esto, los demás decidieron orar y desde entonces se dedica un mes al año a promover el compromiso de los lasalianos con la paz.